Gobierno presento al Congreso proyectos para adelanto del elecciones 2023

Tuvieron cuatro días para ponerse de acuerdo y encontrar un proyecto consensuado, pero la intransigencia de los legisladores generó que el Congreso fracase ayer en adelantar las elecciones generales para este año.

Ante esto, la presidenta Dina Boluarte cumplió con lo que había anunciado el domingo.

«Lamento que el Congreso no haya alcanzado el consenso necesario para adelantar las elecciones. Como anuncié en el último mensaje a la nación, presentaremos inmediatamente el proyecto de ley para que peruanos y peruanas puedan elegir democráticamente a sus autoridades el 2023», publicó en la cuenta oficial de la Presidencia en Twitter.

El presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, salió a la puerta de Palacio para reforzar el mensaje.

«Hemos ingresado en mesa de partes del Congreso un proyecto de ley que por mandato constitucional tiene el carácter de urgente y prioritaria una iniciativa legislativa en la que estamos proponiendo el adelanto de elecciones generales para el año 2023», expresó.

Hay expectativa por la respuesta del Congreso, pero Boluarte ha pedido ser prioridad.

«Reiteramos nuestra exhortación para que esta iniciativa legislativa sea vista por el Parlamento con responsabilidad y la urgencia que el país demanda», dijo la jefa de Estado.

Otárola se sumó al pedido y exhortó al Parlamento a debatir pronto dicha iniciativa «para lograr la paz necesaria en el Perú luego de un mes de manifestaciones en varias regiones».

Fracaso fujimorista

El lío en el Legislativo empezó cuando el presidente de la Comisión de Constitución, «Nano» Guerra García, elaboró un texto sustitutorio, buscando el aval de las bancadas de la derecha, que establecía que los comicios de este año sean complementarios y que el mandato de Boluarte y de los parlamentarios culmine en abril del 2024.

Así, quedaba abierta la puerta para que los congresistas puedan postular y pugnar por su reelección. Pero eso tampoco le bastó al fujimorista Guerra García para que su dictamen en mayoría reciba el respaldo de Renovación Popular, Avanza País y Acción Popular.

El texto sustitutorio de Guerra García fue rechazado: solo 54 congresistas votaron a favor, 68 en contra y 2 se abstuvieron. Un fracaso del fujimorismo, que controla la comisión de Constitución, y del Congreso en sí.

Renovación Popular insistió con que no se les puede recortar su periodo (que termina en 2026), y los parlamentarios de Perú Libre, Perú Democrático, Perú Bicentenario y Bloque Magisterial insistieron con que estos comicios incluyan un referéndum para una asamblea constituyente. Una facción de Acción Popular y de Avanza País afirmó que las elecciones complementarias no resolverán la crisis política, en tanto que Cambio Democrático calificó de «burda maniobra» el texto sustitutorio de Guerra García al plantear un proceso electoral en el que sus colegas puedan postular y buscar su reelección.

Solo los grupos políticos de Fuerza Popular, Alianza para el Progreso, Podemos Perú, parcialmente Somos Perú, Acción Popular y los no agrupados respaldaron el dictamen. Pero eso no bastó. Ni siquiera llegó a los 66 votos que hubieran permitido someterlo a referéndum.

Consumado el fracaso, solo quedaba una opción, el dictamen en minoría presentado por el congresista de Perú Libre Jaime Quito. Este plantea una primera vuelta electoral en cuatro meses y que en esa votación se incluya un referéndum para una asamblea constituyente.

Se iba a iniciar un nuevo debate cuando Alejandro Cavero (Avanza País) lo interrumpió e intentó presentar otro dictamen en minoría para que las elecciones generales sean en abril del 2024 y se aproveche para consultar a la ciudadanía si los sentenciados por terrorismo, secuestro y homicidio calificado pueden ser candidatos. Entonces, para incluirlo en la discusión, planteó una cuestión de orden, pero esta fue rechazada con 58 votos en contra, 52 votos a favor y 2 abstenciones. Jugando su última carta, Adriana Tudela, de Avanza País, planteó una reconsideración para volver a votar hoy esa cuestión de orden y salvar la iniciativa de Cavero.

A las 5:15 de la tarde, el presidente del Congreso, José Williams, abrumado, con congresistas de Perú Libre reclamándole en medio del hemiciclo, con sus colegas discutiendo a sus espaldas y aislado, suspendió la sesión hasta hoy a las 10 de la mañana. En este pleno se votará la reconsideración de Tudela y el dictamen en minoría de Jaime Quito, de Perú Libre.

El temor de la derecha

Al cierre de esta nota, Avanza País no tenía los votos suficientes para que su propuesta sea incluida en el debate. Su alianza con el fujimorismo está debilitada, al punto que sus congresistas Adriana Tudela y Rosangella Barbarán, de Fuerza Popular, discutieron públicamente.

«Con la votación de la cuestión de orden quedó demostrado que no se tenían los votos ni para abril 2024. Fuerza Popular lo alertó porque la izquierda quería forzar que se vaya a referéndum para presionar por la constituyente. La asamblea constituyente, de ninguna manera», tuiteó Barbarán.

Tudela no se quedó atrás y le respondió: «Antes de que ustedes patearan el tablero y sabotearan el adelanto al 2024, ni siquiera existía la posibilidad».

La misma situación atraviesa la iniciativa de Quito Sarmiento. Sin los votos de la derecha, será imposible que obtenga los 87 votos a favor. Aunque Tudela, en declaraciones a Canal N, manifestó su temor de que el dictamen en minoría de Perú Libre consiga 66 votos. Tudela aseguró que un sector de Acción Popular y de Podemos Perú no han cerrado filas contra la posibilidad de una asamblea constituyente y que, por ende, eso representa un riesgo.

Las bancadas de Perú Libre, Perú Bicentenario, Perú Democrático, Bloque Magisterial y Cambio Democrático tienen 42 congresistas. Están a 24 votos de conseguir un referéndum para que se le consulte a la ciudadanía si desea que las elecciones generales se adelanten para este año y si avalan que en ese proceso electoral se le consulte si están de acuerdo con una asamblea constituyente para redactar una nueva constitución.

En la campaña electoral del 2021, los candidatos de Acción Popular, Alianza para el Progreso, Partido Morado y Podemos Perú no descartaron la reforma total de la Constitución de 1993.

 El temor de Avanza País y de otros partidos de derecha es que un grupo de congresistas de estas fuerzas políticas se sumen a la izquierda. Caso contrario, de rechazarse los dictámenes de Quito y Cavero, el adelanto de elecciones, mediante el Congreso, será un capítulo cerrado hasta la nueva legislatura.

Si bien la presidenta ha cumplido con presentar una propuesta de ley para que se vayan todos en octubre de este año, esta iniciativa, al abordar el mismo pedido del primer dictamen de Guerra García, no podría ser discutida en esta legislatura, dijeron fuentes del Congreso.

Como sea, si el Legislativo insiste en actuar de espaldas al país, solo quedaría un camino legal para adelantar las elecciones: la dimisión de Boluarte. ❖

Votación de la reconsideración para volver a votar el proyecto de ley de elecciones 2024 y adelantarlas para este 2023

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PL rechazado y PL en debate

El texto sustitutorio presentado por «Nano» Guerra García no encontró eco ni siquiera en las bancadas de derecha que fueron aliadas del fujimorismo.

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Dictamen en minoría de Jaime Quito, de Perú Libre: elecciones este año y referéndum para una asamblea constituyente. Será debatido hoy en el Pleno.

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Renuncia de Boluarte sí obligaría a ir a elecciones

Enfoque por: Fernando Tuesta, politólogo

Lo importante es ver qué capacidad existe para que los proyectos de ley enviados anoche al Congreso por la presidenta Dina Boluarte sean aprobados. Como hemos visto, el Congreso ha tenido serias dificultades en lograr un mínimo de consenso, y hemos visto que dos dictámenes han sido rechazados.

Es difícil entender cómo un nuevo proyecto, en un sentido incluso con mayores restricciones para el deseo de la mayoría de congresistas, pueda tener mejor futuro.

Eso es por uno de los proyectos. El segundo es inaplicable. El Congreso actual no puede limitar las funciones del próximo Congreso, tal como lo señaló la presidenta. Habría que ver la redacción del texto en todo caso.

Otra cosa: en el primero de los proyectos, el referido a que las elecciones sean este año, el 8 de octubre del 2023, parecería que no hubiera grupo político que estuviera a favor; entonces, ¿es un acto político? Claro que sí. Pero, si no hay posibilidad de apoyo, sería solo un saludo a la bandera.

Sobre si con los proyectos de Boluarte se podría repetir la situación vista en el Congreso en las sesiones recientes, pues sí, y puede ser peor. El último texto sustitutorio apenas alcanzó –tengo entendido– 54 votos, ¿qué nos haría pensar que este nuevo proyecto va a alcanzar un número mayor?

Es difícil además. Ya ni siquiera es 54, se trata de 87 y que sea ratificado en la próxima legislatura. Yo lo veo con muy poca viabilidad realmente.

Es evidente que seguimos entrampados. La única posibilidad de que lo que haga la presidenta Dina Boluarte pueda tener algún efecto es su propia renuncia. Esta obligaría a una inmediata convocatoria de elecciones. ¿Es esa la única salida por ahora? Sí, en la medida que está en manos de ella. Es inmediata, no hay mayor trámite que presentarla. Fuente: LR